Y tú, ¿Qué responderías?
- Si fueras invisible…
- Si la música no existiera…
- Si el día durara 50 horas…
- Si encontraras 50 millones de pesos…
- Si despertaras transformado en mosca…
- Si tuvieras superpoderes…
- Si pudieras teletransportarte…
- Si pudieras gobernar el mundo…
Nuestros estudiantes de Enseñanza Básica vivieron este desafío.
Sus ojos abiertos, su mirada pensante y curiosa y su gesto de motivación sorprendieron a los docentes, quienes en las respuestas pudieron comprobar la importancia de generar estas instancias de reflexión compartida.
Sabemos lo importante que es la emoción para el buen aprendizaje, lo avala la neuroeducación, que afirma el principio de que la emoción y la cognición son procesos que van unidos.
Nuestros estudiantes respondieron:
