Esta instancia es realizada hace más de 10 años en conjunto entre el Kínder y el Departamento de Educación Física. “La motivación por hacer deporte en los niños y el hacerlo en grupo, hace que esta actividad se transforme en un desafío para ellos y los lleve a alcanzar sus propias metas con el apoyo del grupo”, señala Mariela Wenzel, coordinadora de Kínder.
Luego de un intento fallido por las lluvias, el grupo A de Kínder trajo sus bicicletas el día martes y estrenaron las pistas con sus cascos y bicicletas a toda velocidad. Lo mismo el miércoles, donde los del grupo B aprovecharon un día maravilloso de sol e hicieron brillar sus ruedas por la pista, siguiendo la rotonda demarcada y la señalética preparada para la actividad.
El miércoles también fue la oportunidad de los niños de Prekínder, quienes pudieron desarrollar la actividad con el grupo completo y quedaron agotados luego de pedalear por el circuito que las Tanten les tenían preparado. Había triciclos, rodas, bicicletas con rueditas y sin éstas, nada era impedimento para que los niños y niñas disfrutaran de la actividad.
A los niños de Spielgruppe les tocó el miércoles y jueves, para ellos era primera vez que participaban de esta instancia, por lo que desde temprano los nervios los invadían por el sólo hecho de entrar al colegio en sus rodados. Para algunos incluso fue la instancia de dejar las rueditas de lado y lanzarse a aprender a pedalear sin ellas. Una experiencia que no olvidarán jamás y de seguro querrán repetir los próximos años en el colegio.
“Es muy lindo lo que se produce en esta actividad, los niños lo disfrutan muchísimo. Es importante también realizar actividades recreacionales con los niños y ellos con sus compañeros. Sobre todo en el contexto que nos ha tocado vivir tras la pandemia. Todos lo pasamos muy bien en estas instancias, incluso después no hay cómo bajarlos de sus bicicletas”, comenta Mónica Prenafeta coordinadora de kínder.